Bucaramanga, martes 11 de marzo de 2014: El conductor de un vehículo particular que fue sorprendido ejerciendo labores ilegales en el transporte de pasajeros, reaccionó violentamente y agredió físicamente a un funcionario del Área Metropolitana de Bucaramanga y a un agente de la Dirección de Tránsito de Floridablanca.
El hecho se produjo este martes durante la ejecución de un operativo de rutina de la Autoridad Metropolitana de Transporte y alféreces del órgano rector del tránsito en Floridablanca, dirigido a combatir el transporte ilegal.
El agresor fue identificado como Sergio Octavio Mantilla Figueroa, conductor del vehículo Chevrolet Spark, de placas CWN 412, quien al verse sorprendido por los agentes de tránsito y funcionarios del Área Metropolitana, reaccionó de manera agresiva.
Testigos presenciales de los hechos relataron que cuando el ciudadano Mantilla Figueroa fue notificado de que su vehículo sería inmovilizado por transporte de pasajeros de forma ilegal, la emprendió primero con insultos y palabras de grueso calibre y posteriormente asestó varios golpes a los encargados del operativo.
Al respecto, la Directora del Área Metropolitana, Consuelo Ordóñez de Rincón, manifestó que la entidad a su cargo llevará el caso ante la Fiscalía, pues “no hay justificación alguna para una actuación como la del agresor, máximo cuando era de plena consciencia del infractor el acto ilegal por el cual se le notificó la inmovilización de su vehículo”.
Estos operativos para contrarrestar la piratería en el transporte se vienen desarrollando con total compromiso por parte de las autoridades metropolitanas y de tránsito de los municipios del área y responden a un plan definido que incluye la toma de pruebas fotográficas y audiovisuales, las cuales son adjuntadas en desarrollo de la investigación que se desprende de la inmovilización del vehículo.
¨Acá no estamos cometiendo acciones caprichosas, es nuestra responsabilidad velar porque el usuario utilice los medios de transporte convencional y masivo autorizados, lo cual es garantía de seguridad especialmente para el pasajero. Al optar por tomar un carro pirata, se está arriesgando a que en un eventual accidente no exista manera de atenderlo y mucho menos, no hay conducto legal para posteriores acciones legales¨, manifestó Consuelo Ordóñez de Rincón.